La niña dibuja un círculo en el suelo. Los transeúntes entran en él, uno a uno. Pronto el círculo se llena de gente que lucha por mantenerse dentro. Una vez que la niña regresa y borra el círculo, la gente empieza a dirigirse hacia ellos.
En 2018, dos cineastas se reúnen en el Observatorio Astrofísico de Abastumani, en las montañas de Georgia, con la intención de captar la belleza del lugar. Cinco años después, Keto Kipiani revisita estas imágenes y vuelve a ponerse en contacto con su codirectora. ¿Podría su fascinación compartida por las estrellas y este lugar intemporal haber ocultado sentimientos románticos no expresados?
Basándose en fragmentos de oscuras películas de ciencia ficción, The Electric Kiss imagina un mundo no muy distinto del nuestro, en el que las personas conectan sus cerebros a una especie de red neuronal que conecta toda la conciencia humana. A medida que las imágenes ciberpunk envueltas en texturas VHS se alternan con pasajes de ruido visual prismático, emerge una cuasi trama